martes, 29 de julio de 2014

Historia del Anillo de Compromiso


Cuenta una leyenda japonesa que las personas predestinadas a conocerse se encuentran unidas por un hilo de color rojo atado a su dedo meñique de la mano. La arteria llamada ulnar es -de acuerdo con expertos - una arteria que va del dedo meñique al corazón; por eso, la leyenda dice que los hilos rojos del destino unen los meñiques con los corazones.

La historia en sí misma dice que entre dos o más personas que están destinadas a tener un lazo afectivo existe un hilo rojo que viene con ellas desde su nacimiento; independientemente del momento en el que ellas vayan a conocerse y no puede romperse en ningún caso. 

Hace mucho tiempo, versa la leyenda, un emperador se enteró de que en una de sus provincias vivía una bruja con la capacidad de poder ver el hilo rojo del destino y le pidió que buscara el otro extremo de su hillo y lo llevara ante quien sería su esposa. La bruja buscó y buscó hasta que dio con una pobre campesina en un mercado, hiriéndola y dejándole una cicatriz en su rostro.  

Aquí termina tu hilo, dijo la bruja al emperador, quien enfureció, empujó a la campesina y ordenó a sus guardias que mataran a la bruja. Años después, al emperador le recomendaron que se casara con la hija de un general poderoso. Cuando llegó el momento de conocer a su futura esposa, vio que en su hermoso rostro tenía la cicatriz de aquella niña, una cicatriz que él mismo provocó al  no ver al destino que había pasado frente a él. 

Desde entonces, los enamorados buscan unir sus dedos, a través de un anillo de matrimonio situado en el dedo anular de la mano izquierda, simbolizando su unión entre ellos y el corazón.
Para continuar con esta tradición se han ideado miles de originales formas de entregar el anillo, empresas como www.volopapilio.com.mx tienen un catalogo interesante de formas de entregarlo.